lunes, 3 de diciembre de 2012



Pasó de ser un "asesino de masas" a un incansable defensor de la vida


Bernard Nathanson fue conocido en Nueva York como "el rey del aborto". Practicó más de 75.000 abortos y fundó en 1969 la Asociación Nacional para la Revocación de las Leyes contra el Aborto (más tarde llamada Liga Nacional para la Acción por el Derecho al Aborto). Luchó por impulsar el aborto libre y legal mientras rechazaba y criticaba las ideas de los movimientos pro-vida al respecto.
 
Pero, tras unos años practicando abortos como médico en los EE.UU., cambió su concepción sobre el aborto, especialmente el día en que pudo observar el corazón del feto en los monitores electrónicos. Fue entonces cuando comenzó a plantearse por vez primera qué era lo que estaba haciendo.
 
En 1984 le pidió a un amigo suyo -que practicaba de quince a veinte abortos al día- que colocase un aparato de ultrasonidos sobre la madre, grabando el aborto. El material sirvió de base para un documental titulado El grito silencioso que sorprendió a la comunidad médica en particular y la sociedad en general.

"Lo hizo -explica Nathanson- y, cuando vio las cintas conmigo, quedó tan afectado que ya nunca más volvió a realizar un aborto".
 
Se convirtió en un activista pro-vida. Posteriormente, el 9 de diciembre de 1996, Nathanson, inmerso en la desesperanza y con la conciencia de haber sido un "asesino de masas", se convirtió al catolicimo, donde encontró la paz.
 
El Dr. Nathanson también denunció las mentiras de la industria del aborto, para favorecer sus intereses, durante años.
 
Adjuntamos un video donde se puede ver al Dr. Nathanson ofreciendo su testimonio.
 

Parte 1/3

Parte 2/3




Parte 3/3